Puerto Rico y el Fútbol: La Pasión que no muere

Un Recorrido Histórico del Fútbol Boricua. Este blog ha sido creado con el deseo de dar a conocer nuestra rica historia futbolística la cual a estado ajena al ojo del puertorriqueño promedio. Tú, sí tú, puedes ser parte de la historia aportando datos, fechas, momentos, fotos, etc. Para tales fines déjanos tu información en la sección de comentarios. Gracias por su tiempo y disfruten del blog.

21 enero 2007

Fútbol de Alta Mar.

Un domingo, Día de Reyes en 1937 se realiza un partido memorable, batalla de titanes. Por un lado los invitados, un onceno conformado por la tripulación de la fragata escuela “Presidente Sarmiento” de la Marina de Guerra Argentina que se encontraba anclado en el puerto de San Juan. Por el otro lado los locales, un conjunto conformado por jugadores del “Náutico F B C” y el “San Juan F C”. El campo de batalla, el parque Luis Muñoz Rivera, la hora, 3:30 PM.

A la ligera pudiésemos dudar de la capacidad técnica de los
invitados pero hemos de recordar que son marinos con una excelente constitución física, basta experiencia en el deporte y que en lo posible, trataban de realizar partidos amistosos en cada puerto al que atracan. Vale notar que la Federación Argentina de Fútbol se establece en 1891 lo que da a entender que el país ya contaba 46 años de experiencia en dicho deporte. Como dijese una nota periodística del encuentro “{...} los argentinos juegan bien, y fuerte, hay que darse cuenta de que son todos ellos jugadores desde pequeñitos ya que es el deporte favorito de Argentina”.

Por los nuestros contamos con los siguientes jugadores a los cuales identificaremos con una “N” los del Náutico y con una “S” los del San Juan:
Portero-
Arturo Cortés ( ex integrante del España FC, N)
Defensas-
Andrés Bueso (N) y Ángel García (N)
Medio Campo-
Eulogio García (capitán, S), Laureano Trigo (medio centro, N), Herminio Otero (S) y Paco Bueso (N)
Delanteros-
Donato Álvarez (S), Navarro (N), Otilio Oberto (S), A. Cayere (N)

Fungiendo como director técnico estuvo el Sr. Ernesto Sánchez y fueron los jueces de línea el Sr. Mas de Ponce y Pepe Rolán de San Juan. Como Arbitro principal el Sr. Portela.

Aquel partido contó con una excelente concurrencia, contando con más de cien automóviles que rodeaban el campo y más de mil espectadores entusiastas de este deporte y curiosos que se acercaban apiñándose para observar el encuentro. El partido inicia con un brillante avance argentino que demostró enseguida el calibre de su juego. La dificultad del terreno por ser demasiado blando para su juego ayudó grandemente a la defensa local de las rápidas acometidas de los ligeros delanteros argentinos.

Los argentinos fueron los primeros en marcar en el primer tiempo un gol del que nadie tuvo culpa. Cuando menos peligro había cayó una bola a los pies del centro delantero quien la empujó al marco sin que nadie tuviese tiempo de evitarlo, concluyendo con esta puntuación el primer tiempo. Este resultado lejos de desanimar a los nuestros generó mayor entrega y entusiasmo puesto que a diferencia de otros partido en donde los nuestros eran abatidos a goles, en este solo había un tanto de diferencia.

Inicia el segundo tiempo con una entrega total de los nuestros, con ataques constantes a la portería contraria los cuales eran neutralizados por una excelente defensiva gaucha. Era tanto el entusiasmo del público que ante las jugadas emocionantes de uno y otro bando aplaudían frenéticamente. No tardo mucho en que llegar el momento de gloria en el que de un magnifico pase del centro delantero frente a la portería a Donato permitiera que este fusilara el gol del empate.

Así concluye este excelente partido con un reñido empate 1 a 1 en donde se puso de relieve el alto espíritu deportivo y caballerosidad es de esperarse en un encuentro de esta clase. En cuanto a los nuestros pudieron festejar por este empate con sabor a victoria al contener a un equipo que había resultado vencedor en todos sus anteriores encuentros.